Segundo Rito:
Te acuestas boca arriba con tus brazos junto al cuerpo. Mantén tu espalda apoyada contra el piso y al inhalar levanta tus piernas juntas y lleva tu barbilla hacia el pecho. En tu exhalación regresas a acostarte. Para hacer más intenso el ejercicio hazlo con las piernas estiradas y trata de que al bajar tus pies queden lo más cerca del suelo sin tocarlo. Después de tus repeticiones toma de tres a cinco respiraciones profundas.
Te acuestas boca arriba con tus brazos junto al cuerpo. Mantén tu espalda apoyada contra el piso y al inhalar levanta tus piernas juntas y lleva tu barbilla hacia el pecho. En tu exhalación regresas a acostarte. Para hacer más intenso el ejercicio hazlo con las piernas estiradas y trata de que al bajar tus pies queden lo más cerca del suelo sin tocarlo. Después de tus repeticiones toma de tres a cinco respiraciones profundas.
